De la máquina de impresión 3D salen implantes amorfos personalizados que, por un lado, tienen la resistencia necesaria y, por otro, son lo suficientemente flexibles como para acompañar y amortiguar los movimientos. Además, las estructuras superficiales porosas de fabricación aditiva facilitan el crecimiento del hueso. En comparación con otros materiales, las calidades de la superficie de 1 micrómetro son significativamente mejores directamente después de la impresión. Una clara ventaja cuando hay que volver a retirar el implante. (Fuente de la imagen: Heraeus AMLOY)

La transmisión óptima es crucial para los puentes de las guitarras. Como los metales amorfos son muy elásticos, transmiten el sonido de una nota más directamente y lo mantienen más tiempo. La alta resistencia de los metales amorfos también abre nuevas libertades de diseño: por ejemplo, se pueden imprimir en 3D estructuras individuales y biónicas que mejoran además el sonido. (Fuente de la imagen: Heraeus AMLOY)

La empresa sueca Oskar Pascal fabrica la primera caja de reloj del mundo hecha de metal ZR01, que es tres veces más resistente que el acero inoxidable. La alta calidad de la superficie satisface las necesidades de los clientes y contribuye significativamente a la conexión emocional del reloj de estilo de vida con su propietario. Gracias al superenfriamiento (supercooling), se consigue una protección contra la corrosión significativamente mayor y una extraordinaria resistencia a la fractura en comparación con la fundición metálica convencional. (Fuente de la imagen: Oskar Pascal)

La carcasa de los auriculares intraurales (in-ear) IE 600 de Sennheiser se imprime en 3D con una aleación de circonio que es tres veces más dura y resistente a la flexión que el acero de alto rendimiento. El resultado satisface los requisitos más estrictos tanto estéticos como funcionales: la superficie no solo presenta un atractivo aspecto satinado, sino que además es extremadamente robusta contra la corrosión y los arañazos. (Fuente imagen: Sennheiser)

El manguito de expansión alberga un gran potencial de mejora mediante la impresión 3D de metales amorfos. Dado que las aleaciones amorfas alcanzan una elasticidad mucho mayor que la de los materiales convencionales se pueden tensar significativamente mejor. (Fuente de la imagen: Heraeus AMLOY)