El tiempo es oro. Debido a la gran cantidad de encargos pequeños y a menudo más complejos, sus programadores deben trabajar con mayor rapidez y sin errores. Un software adaptado a su sistema le ayuda, por ejemplo, anidando piezas de manera óptima para reducir sus costes de material. Si fuera preciso, el software se ocupa incluso de todos los pasos del proceso, desde la solicitud hasta la entrega de la pieza terminada. En cualquier caso, esto le permite disponer de más tiempo para nuevos encargos.